domingo, 7 de abril de 2013

Capítulo 12.


George: Larga historia, no hay tiempo para eso. ¿Entramos?

Lo miramos incrédulas, pero era obvio que no iba a hablar ahora… ya le sacaría la verdad.

Ashley: Bueno, creo que mejor me voy. Suerte con Martha, George, suele ser muy cabeza dura.

George soltó una carcajada y se despidió de ella, mientras yo me limitaba a mirarla mal.

Yo: Qué maldita. Anda pues, antes de que te acabe a puñetazos.

Ashley: Ah, olvidaba que eras la fuerza encarnada. – dijo con una risa sarcástica. – Adiós chicos.

Y se fue ignorando mi mirada asesina. A mi lado George suspiró y entró a la biblioteca. Lo seguí de cerca mientras por mi cabeza rondaban un montón de preguntas, pero todas alrededor de una central… ¿De verdad Stuart era capaz de hacer eso?

Nos sentamos y él abrió el libro en la página en la que habíamos quedado la vez pasada, pero no le presté atención. No haría ni una suma hasta que me dijera que le había pasado.

George: Decimos que al tener la siguiente ecua… ¿Qué me estás viendo? – se interrumpió cuando notó que lo miraba fijamente en lugar de anotar en mi cuaderno.

Yo: ¿Qué te pasó? Y no me digas que nada, ese tipo de moretones no se hacen con “nada”.

George: Solo tuve una pelea, no es nada grave.

Yo: ¿Con quién? – mi respiración estaba acelerada. Si decía lo que temía que iba a decir…

George: Con un tipo que en mi vida había visto…

Estaba apartando la mirada. Era obvio que no me había contado la verdad completa.

Yo: Dime la verdad.

George: Te estoy contando la verdad

Yo: Quiero TODA la verdad.

Me miró incómodo y cerró el libro. Luego me miró a los ojos.

George: De acuerdo. Luego de que te fuiste a tu casa, me di cuenta de que me había quedado con uno de tus acrílicos – dijo mientras rebuscaba en su mochila. Al final sacó un acrílico rojo brillante y lo dejó sobre la mesa – Mira, aquí está. Tenía la intención de llevártelo a tu casa directamente, pero tenía que dejar a Margarita primero. Así que la dejé y fui hacia allá, pero cuando estaba como a dos cuadras de tu casa, un tipo se apareció de la nada y al parecer me reconoció, porque me golpeó con mucha rabia. No tengo ni idea de qué le hice, ni siquiera lo conocía; pero era tan fuerte que me dejó inconsciente. Lo último que escuché fue un nombre… Spike, Sam… Stuart, creo. Luego me desperté y me encontré con tu hermano que me ayudó a levantarme. Se ofreció a ir a mi casa, pero le dije que podía solo… me dijo que no conocía al tipo que me golpeó, pero que ya no había de qué preocuparse. Y ya, eso fue todo.

Miré el tubo de acrílico distraída… con que por eso se había devuelto, con tan mala suerte de encontrarse a Stuart por el camino. Le di vueltas, a la par que mi cabeza también lo hacía. Era un caos, pero estaba peor mi corazón. Nunca me había dolido tanto algo, y tampoco había sentido tanta rabia como hasta ahora.

George: Martha, ¿seguimos?

No respondí. De hecho ni siquiera procesé las palabras, seguí dándole vueltas al tubito sin prestar atención.

George: ¡Martha! – dijo angustiado, zarandeándome un poco. Desperté de mi sopor y contemplé el semblante confundido de mi amigo sin realmente verlo.

Yo: Claro, sigamos.

Para mi sorpresa, no seguimos. En lugar de eso, George se levantó y empezó a empacar sus cosas. No lo detuve, podía irse, de hecho era mejor así. Pero reaccioné cuando empezó a empacar las mías.

Yo: ¿Qué… qué haces George? ¡Deja mis cosas! – dije casi entrando en un shock nervioso. Él me miró preocupado y suspiró.

George: Aquí es complicado hablar y como es obvio que no estudiaremos nada más conscientemente, saldremos un poco para respirar. Y tú me contarás qué te sucede.

Yo: No es necesario, siéntate. Sigamos con la clase.

Me ignoró olímpicamente, tomo sus cosas y las mías y salió de la biblioteca. Salí tras él como zombie y caminamos un buen rato en silencio. No me apetecía hablar, y era obvio que él no quería tocar el tema con demasiada rapidez, así que fue algo incómodo. Pero me dio tiempo de ordenar mis pensamientos, de manera que cuando George me preguntara, no me hallara tan fuera de lugar…

George: Llegamos – dijo en un susurro, interrumpiendo mi intento de orden mental.

Miré alrededor, era un parque pequeño con árboles frondosos. No recordaba haber estado ahí alguna vez, pero desde ahora iría con más frecuencia. Era hermoso.

George se sentó en el pasto y yo me acomodé junto a él y luego de un periodo de silencio, empezó a hablar.

George: ¿Y no me vas a contar?

Yo: ¿Contar qué? – respondí haciéndome la que no sabía del tema. ¿Dije antes que era mala fingiendo? Lo seguía siendo.

George: Pueda que te conozca hace poco, pero sé que esta actitud tuya no es normal. Tiene algo que ver con el chico que me golpeó ¿cierto? Tú lo conoces, es cercano a ti.

Sonreí irónica. Era increíble que me conociera tan bien, de hecho daba algo de miedo.

George se levantó y subió a la rama de un árbol.

Yo: ¿Qué haces? ¡Te vas a matar! – grité desde el suelo alarmada.

George: Vamos, sube ya.

Subí con cuidado y casi convencida que me iba a caer en cualquier momento. Una vez arriba me maravillé de la vista.

George: Bueno, ahora tienes otra perspectiva de las cosas, me puedes contar.

Yo: De acuerdo, pero déjame acercarme. – me rendí y me desplacé de rama en rama cual Tarzán hasta llegar a su lado, pero una vez llegué, un dolor horrible recorrió todo mi brazo. Hice un gesto de dolor… que George notó.

George: Déjame ver ese brazo.

Yo: No es nada, creo que fue un golpe por el camino de subida.

George: No importa, déjamelo ver – impuso y agarró mi brazo con cuidado. No me opuse. Levantó la manga de mi blusa, dejando a la vista un enorme moretón. Pero no era cualquier moretón, éste tenía la forma de una mano. Una mano conocida…

George: ¿Quién te hizo esto? – gruñó con ira. Recordé a Stu y su insistencia camino al Instituto…

Yo: Nadie. No me había fijado hasta ahora, de seguro fue John o alguien desconocido. Sí, de camino al instituto alguien me agarró el brazo con fuerza… no pensé que fuera importante.

Él me miró con una chispa especial en sus ojos marrones. Sabía que estaba mintiendo, pero ante todo, sabía la verdad y sabía que yo sabía que él sabía la verdad. Me mordí el labio, preocupada.

George: Fue tu novio ¿verdad? Y él también me atacó anoche. – afirmó.

Me recliné sobre la rama y miré hacia el suelo. No me gustaba esto que estaba sucediendo. George soltó un bufido.

George: ¿Y ese cretino quien se cree? Espera a que lo vea, esta vez no le irá tan bien. – soltó enojado y empezó a bajarse del árbol. Me enderecé, pero no hice nada por detenerlo. No sé si debí hacerlo…

Una vez abajo, nos dirigimos a mi casa y cuando estábamos cerca, divisé a John y a Stuart hablando afuera.
“Mal día para dejar las llaves, Lennon” pensé soltando un suspiro.

(NARRACIÓN NORMAL)

John levantó la vista cuando escuchó pasos a lo lejos y se revolvió incómodo. Esto no era bueno, si Martha iba con George, significaba que ya lo sabía todo. El chiquillo venía bastante enojado… pero lo que más le preocupó, era que venía con Martha y si Stuart lo veía con ella lo iba a terminar de matar.

John: Creo que tenemos visitas… - dijo sin poderse resistir a una pelea.

Stuart levantó el rostro y sus facciones se tornaron bruscas. Se levantó y se dirigió hacia ellos, que tampoco venían muy pacíficos.

Stu: ¿Qué haces con mi novia? – espetó con ira cuando estuvo lo suficientemente cerca. Martha frunció el ceño al escuchar la última palabra.

George: Defenderla de gente como tú, ¿qué no ves?

Si de por sí la tensión ya era cortante, esas palabras no la mejoraron demasiado.

Stuart lanzó un puñetazo de la nada directo a la ya muy maltratada cara de George pero terminó en el rostro de Martha. Genial, ahora se habían metido directamente con John.

John: ¿PERO QUE HICISTE, ESTÚPIDO? ¡LE PEGASTE A MI HERMANA!

Stuart no reaccionó. Estaba estático mirando a Martha, que estaba inconsciente en el suelo, cuando un puñetazo llegó, esta vez a su cara.

John: Largo, escoria. A mi hermana no la tocas. Y no te quiero volver a ver por aquí.

Sorprendentemente, Stu no respondió nada, simplemente se fue caminando como si hubiera visto un fantasma. John se inclinó para ayudar a George a ayudar a Martha. Entre ambos la levantaron y la llevaron a la casa.

John: Las llaves, maldición - gruñó y empezó a buscar en la chaqueta de Martha. Cuando las encontró entraron y la dejaron sobre su cama, en la que despertó poco más tarde.

Martha: ¿Qué pasó? – musitó somnolienta.

John la miró enojado. Que niña tan tonta podía llegar a ser a veces…

John: ¿A quién se le ocurre interrumpir la trayectoria de un puñetazo? Loca, casi te mata con ese golpe.

Ella parpadeó desconcertada y notó la presencia de George en una esquina.

Martha: ¿Estás bien?

El aludido bufó exasperado.

George: ¿Que si estoy bien? Te dieron un puñetazo que iba dirigido a mí, te dejó inconsciente y me preguntas si estoy bien. Algo anda mal en esa cabecita tuya, estoy seguro.

Ella solo sonrió, pero ese esfuerzo la hizo contraer su boca de dolor. John frunció el ceño.

John: Deberías dormir, enana. Te hará bien.

Martha le mostró la lengua, pero se acomodó en su cama para dormir. Pocos segundos después estaba profunda.

John y George se miraron preocupados y bajaron al primer piso, se despidieron y George se fue a su casa, si se demoraba más sus padres lo tendrían encerrado de por vida. John por su parte subió al cuarto de su hermana y tiró el cuadro que ella había hecho por la ventana. Estaba seguro de que no lo extrañaría.

(NARRA STU)

Si antes me sentía culpable, esto no había ayudado en nada. Le había pegado, lo que pensé que nunca haría, se había vuelto realidad. En ese momento juré no volver a hacerle daño, y por sobre todo, no golpear nunca más a ninguna mujer. Era repulsivo

Tenía que pedirle perdón, y aunque John me había advertido casi a muerte que no me quería cerca, decidí arriesgarme y volver a su casa. Cuando iba llegando, noté algo que salía de la ventana de su cuarto, así que me acerqué para contemplarlo mejor.

Era un cuadro. Y no cualquier cuadro, era un cuadro sobre mí. Me había dibujado de una manera impresionante y perfecta, pero la había tirado. Miré hacia arriba y vi su ventana abierta.
Bueno, escalar un poco no me haría daño…

Tengo un sueño tan grande, que casi me olvido poner este pedazo al final. Así que si captan incoherencias en mi escritura, ignórenlas, haré un nuevo estilo literario que se llame "los adormecidos". 
Anyway, aquí va.
Claudia, me halagas muchísimo, que te hayas quedado a leer hasta tan tarde es hermoso :') sabía que no podía ser la única que hacía eso. ¿Dónde está tu capítulo? Muero por leer algo. Lo sé, yo también quiero que Rita vuelva :(

Valentina: Ya, cálmate, tus comentarios asustan a la people. ¿Leíste lo que respondió Claudia? Mira como te aman :3

Aly: ¿PORQUE NO SUBES? Nadie sube, que depresión -.-' Ya, aquí está, un capítulo de solo Yorch. 

Duerman cariños míos, sueñen con mi insomnio.



6 comentarios:

  1. YORRCHHH AILOVIU TE ANO! XDDD PLZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZ ... :c putstuart putostuart >:ccccccccc

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  2. ¡Hooooooola! Me retrasé por aquí, pero ya estoy al corriente de nuevo. Y nada, no decepcionan, está buenísimo, esto de Stuart abusivo no me hace sentirme bien hacia él, pero George, tan buen chico, me lo puedo imaginar con sus facciones inocentes caminando por las calles grises de Liverpool Ay, Harrison querido.

    Como siempre, un abrazo asfixiante a ambas, son unas genias, sigan así.

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  3. Oh bueno :mueveelpie: ... No tengo mi compu fjfdkdh >:c por eso no subo... Y maten a Stu D: ... Nah mentira e.e Stu no puede morir ;-; que ya aparezca Paul aaay D: digo, a John ni muerto se le quita lo traviezo y malvado sexy *0* ... Ojalá y Stu se caiga de la ventana D:<... Es que e.e es abusivo y no es justo :c . Si Stu no cambia su actitud... Paquita la del barrio lo visitará y le cantará "Tres veces te engañe, tres veces te engañe tres veces te engañé, la primera por coraje, la segunda por capricho y la tercera pooor placeeeeeeeeeeer" bien eso no tiene nada que ver con el fic *o* pero akdkd sube pronto que ya no es justo que golpeen a Jorge por hacer el bien xd


    Bonito día

    -Pollo de KFC

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  4. HOLAAAAAAAA
    como fui tan tonta de no haber comentado antes :'( y YO DEBERÍA SER NO SE.... ALGUIEN QUE HIRIERA A STU!!!!!!!!!
    ok ayyyy ayyyyy S.L. Borboa comentooo!!! ok I miss rita and i have english class..... bye

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    1. ok ok ok ok... hasta ahora me meto a blogger y por eso hasta ahora comento mhhh oh sister you are a wizard!!!! :)?
      ok sister por orden de Mónica Paola etc etc ella no sabe como hacer que yo haga daño a Stu... y es tu deber hacerlo:') no me desepciones... Stu tiene mucha falta de punteria... jajaja no mentiras... quiero pegarle a stu herirlo, no travesuras... HERIRLO DE CUERPO!!!!! así pegarle jahia ok... y si ves hermanita S.L. Borboa comento!!!!! ya ves que tu hermana es una buena hermana que te guarda lasagna y hace lo que quieras... y Claudia.... hazme un altar!!... mentiras jajajajajajajajaa no soy así solo que me dijeras gracias doy saltitos con un pié ok.... ahora si bye

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  5. Nooo ma pobre martha jajaja D: che Stuart, qué te paso? antes era chevere :S sigo leyendo que el chisme esta bueno :P

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